La economía estadounidense creció a un ritmo anual de 2.5% entre julio y septiembre, informó el Gobierno en su primera estimación sobre el desempeño de la economía en el tercer trimestre.
El Producto Interno Bruto registró su ritmo más rápido en estos tres meses del año, de la mano de una aceleración del gasto de los consumidores y las empresas, en un impulso que podría extenderse a los tres últimos meses del 2011.
La expansión fue un alivio bienvenido para una economía que parecía al borde de la recesión hace unas semanas.
Esta cifra marca una fuerte aceleración respecto de la tasa de crecimiento de 1.3% vista en el segundo trimestre y estuvo justo en línea con lo esperado por los analistas.
“Es un alivio, pero todavía hay mucho trabajo que hacer para continuar una recuperación sostenible”, comentó Sean Incremona, economista de 4CAST.
Los consumidores y las empresas parecieron dejar a un lado sus temores sobre la recuperación entre julio y septiembre. El gasto del consumidor fue el más fuerte desde el cuarto trimestre del 2010, mientras que la inversión empresarial fue la más alta en más de un año.
Incluso las empresas no habían previsto una demanda suficientemente fuerte y se mostraron lentas en el reabastecimiento de sus inventarios.
La vitalidad del gasto y la lentitud de la acumulación de inventarios de las empresas sentarán una base para un sólido cuarto trimestre, pero una desaceleración en Europa y el agotamiento de la demanda reprimida en Estados Unidos podrían ser un punto débil a inicios del 2012.
Y el ritmo de recuperación está aún demasiado débil para rebajar la tasa de desocupación, que se ha mantenido por sobre el 9% por cinco meses consecutivos.
Según un informe separado del Departamento de Trabajo, las nuevas solicitudes de subsidio por desempleo cayeron en dos mil la semana pasada a una tasa desestacionalizada de 402 mil, apuntando a una mejora gradual en el mercado laboral.
Desde fines de julio, la cifra semanal de estas solicitudes se ha mantenido entre las 395 mil y 432 mil. La mayoría de los economistas considera que una cifra sostenida, por debajo de las 400 mil señala una reactivación del mercado laboral suficientemente robusta como para bajar la tasa de desempleo.
El promedio de solicitudes en cuatro semanas, que se considera un indicador más fiel de las tendencias, subió en mil 750 y se ubicó en 405 mil 500. Hace apenas un mes el promedio de cuatro semanas estaba en 418 mil solicitudes.
Durante la recesión entre diciembre de 2007 y junio de 2009 la economía estadounidense perdió casi 8.4 millones de empleos.
Washington
No hay comentarios:
Publicar un comentario